La influencia de los eventos empresariales
La convocatoria a un evento se logra en buena parte diseñando un contenido interesante y que estimule la asistencia. Cuando abordamos la presencialidad otro elemento clave es promover la fluidez comunicativa entre organizadores y asistentes. Este objetivo se logra a través del diseño de un programa interactivo.
El networking es uno de los propósitos que más destacan a la hora de argumentar la asistencia a un encuentro corporativo. Ya sea un evento de incentivo, conferencia, congreso o el lanzamiento de un producto. Para nuestro equipo, socializar, romper con el diarismo, es beneficioso para el desarrollo humano de cualquier industria o empresa.
Tener previsto desde un principio poder recolectar datos, respuestas y opiniones sobre la calidad del evento, tiene que ver con el principio interactivo. Esta acción compromete a todos los actores involucrados y se hace parte de la memorabilia del encuentro.
Contar con un soporte tecnológico adecuado al formato del evento, es darle su justa importancia a este aspecto cada vez más determinante y que va mucho más allá de tener una conexión wifi disponible.
Si en la dinámica organizacional diseña una aplicación a la medida del evento, nuestra ventana es ilimitada. Desde salas de conversación, foros, galerías fotográficas, contactos, calendario de actividades y hasta concursos, hará que los usuarios sea un agente multiplicador de la marca.
La activación de cuestionarios o encuestas es otro recurso muy eficiente en la intereacción. La activación de las redes permite monitorear y agrupar con datos más reales los intereses y público especializado en la materia de nuestro evento.
En caso de que las políticas de seguridad así lo requieran, diseñar una red específicamente para el evento permite a la organización proyectar una vía de comunicación donde la expresión sea más simple para el análisis final. Conocer el lenguaje digital es vital para mantener un ambiente de comunicación eficiente.
Las redes no inventaron los muros, desde antes existen los muros o paredes sociales corporativas. Estas permiten como en el caso de las carteleras colgar mensajes a la vista de todos los participantes. Los móviles pueden ser un elemento distractor, pero podemos hacer de esta realidad un hecho a favor integran su uso a las dinámicas de interacción.
La realidad virtual ha ideado miles de formas de identificación y obtención de información. Desde brazaletes hasta códigos QR, los espacios se hacen más exclusivos cuando la información se distribuye solo entre los interesados.
La gamificación es la opción ideal para que los participantes hagan un juego de su interacción, desde armar un rompecabezas divulgativo, encontrar un “tesoro”, cualquier misión puede resultar entretenida, inclusive si nos abrimos una forma híbrida de participación.
Retar de manera inteligente tanto a organizadores como a participantes para oír sus voces y conocer sus comentarios, a través de un moderado recreará un ambiente confortable.
La creatividad y las buenas ideas son las claves para seguir los objetivos.