Es un estilo de decoración que tiene su origen en las grandes casas inglesas de campo, en las que lo que más predominaba era la mezcla de elementos antiguos con otros más modernos y actuales.

El significado de este estilo se centra en dos términos muy diferentes entre sí. Por un lado  shabby, que el significado de esta palabra es desgastado o desaliñado. Y por otro lado tenemos chic, que significa distinguido, elegante o de moda. Se utilizan elementos viejos o antiguos mezclados con algunos más modernos, que ayudan a darle ese aspecto moderno y lucido a los elementos más antiguos. Predominan en la paletas de colores el blanco y los matices pasteles.

En el estilo shabby chic se utilizan mucho los elementos de madera o de hierro. Por ejemplo, cabeceros de cama de hierro con un aspecto un tanto envejecido pero que a la vez tienen un toque de modernidad, son perfectos para lograr este estilo. En el caso de la madera, el estilo sería igual que con el metal. Armarios o muebles con un toque desgastado y antiguo son los más utilizados.

Para los textiles y los tejidos, lo más utilizado suelen ser textiles y tejidos de estilo románico. Los estampados más utilizados son los estampados con flores. Todos estos textiles suelen ser de tonalidades suaves, colores pastel y la presencia del color blanco. Es muy habitual ver en una mesa de madera blanca de un salón, un juego de café o de té con un toque personal: una mezcla entre un estilo clásico y elegante, pero con un pequeño aspecto antiguo. Velas y los jarrones antiguos. En el caso de los jarrones, se suelen utilizar para tener flores en colores suaves como el rosa. Los cojines y las grandes cortinas también son complementos muy utilizados a la hora de decorar el dormitorio.